domingo, 23 de octubre de 2011

Las bebidas de lujo redescubren el mercado argentino

Por Alfredo Sainz | LA NACION
De la mano de la soja y el boom del consumo, el mercado argentino de las bebidas de lujo se convirtió en una plaza apetecible para las marcas de bebidas premium . La multinacional Pernod Ricard acaba de anunciar el lanzamiento en el país del whisky escocés Royal Salute 62, un blend que cuenta con 40 años de añejamiento, que saldrá a la venta con un precio de 15.000 pesos la botella. En Pernod Ricard precisan que la partida inicial que vendrá a la Argentina es de sólo 30 botellas, de las cuales 24 ya están prevendidas. De esta manera, la nueva línea desplazará al Royal Salute 38, cuya valor al público ronda los $ 4600 por unidad, como la bebida más cara del mercado. El Royal Salute 38 se lanzó en la Argentina hace dos años, con una partida de apenas 20 botellas y este año llegaron a las 400 unidades vendidas. "En este segmento no sólo entra a jugar la calidad de la bebida, que es excelente, sino también el envase y el packaging. En el caso del Royal Salute 62, la botella es de un cristal doble, elaborada en forma manual", señala Daniel Cushnan, director de marketing y exportaciones de Pernod Ricard Argentina.

PRONÓSTICOS FAVORABLES

La familia Royal Salute es la línea más exclusiva de Chivas y constituye el tope de gama dentro del segmento de whiskies de lujo. Esta categoría reúne a los escoceses con más de 21 años de añejamiento y precios que parten de los $ 600 por botella, y es uno de los segmentos de mercado con que crece con más fuerza en la Argentina. Si bien representa apenas 4% del mercado total del whisky en el país, con una facturación de $ 8,8 millones anuales, en los últimos cuatro años logró duplicar sus ventas y en el sector además esperan para los próximos tres años un crecimiento superior al 50%. "A pesar de que el mercado de destilados premium en la Argentina es pequeño, hay muy buenos pronósticos de ventas porque cada vez hay más público que se interesa por consumir esta gama de productos, que buscan interiorizarse y conocer las opciones que hay en el mercado", explicaron en la firma Moët Hennessy Argentina, que participa en el negocio con el vodka Belvedere, el cognac Hennessy y el whisky single malt Glenmorangie.

TIEMPO DE AÑEJAMIENTO

Tras los pasos del whisky, las otras dos categorías en las que las bebidas de lujo tienen más potencial de crecimiento son el vodka y el ron. En el primer caso, los vodka premium -con un valor al público que parte de los $ 100- ya representa más del 15% de las botellas que se venden en el país y vienen creciendo a una tasa superior al 30% anual. El liderazgo de la categoría está en manos de Absolut, que controla tres cuartas partes de las ventas, y en la marca destacan que la Argentina es el país donde más crecen sus ventas en el mundo, con un incremento interanual del 61% en 2010 y una inserción especialmente fuerte en los mercados del Noroeste, de la mano de los vodkas saborizados. Mucho más incipientes es el nicho del ron de lujo, donde la marcas internacionales recién están dando sus primeros pasos en el país, con el lanzamiento de partidas de botellas que cuestan hasta $ 2000.

La hora de los BRIC

El descubrimiento del mercado argentino por parte de las marcas de bebidas de lujo se inscribe dentro de un fenómeno más global, en el que los países emergentes juegan un papel cada vez más importante. "Los consumidores de los países BRIC (Brasil, Rusia, India y China) son los que impulsan el crecimiento del mercado de productos de lujo y esto es algo que las marcas occidentales premium comprendieron aumentando su presencia en ciudades que se han convertido en verdaderos centros, como Shanghai, San Pablo y Moscú. América latina también ha crecido luego de la crisis de 2008. En primer lugar Brasil, seguido por México y la Argentina", explica Marisa Koifman, una consultora especializada en el mercado de lujo.

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