sábado, 29 de noviembre de 2008

En algún momento el país tuvo 7 aportantes activos por cada pasivo para financiar las prestaciones, pero esa relación se redujo a menos de 2 .

¿Cómo va a sostener el Estado a través del tiempo el pago de las jubilaciones y pensiones del régimen de reparto? ¿Habrá cambios en las prestaciones? La cuestión sobrevoló ayer en una jornada sobre la reforma previsional, organizada por la Universidad Católica Argentina, en la que los economistas Ricardo Arriazu y Javier González Fraga coincidieron en que ese debate no se dio en el tratamiento que tuvo la iniciativa de eliminación del sistema de capitalización, convertida en ley a sólo un mes de haber sido anunciada.

Al disertar como último orador de la jornada, el director ejecutivo de la Anses, Amado Boudou, admitió que el sistema estatal está asumiendo, a partir de la nueva ley, el compromiso de hacerse cargo de más beneficios en el futuro. Pero enseguida aclaró que, según su visión, el sector público también iba a tener que afrontar más pagos en caso de continuar el sistema tal como estaba, porque "si las AFJP no iban a dar respuesta, el Estado no debía olvidarse del problema" de cubrir a los afiliados.

Según el funcionario, la necesidad de que el sector público derivara recursos -por ejemplo, para que los jubilados de capitalización alcanzaran el haber mínimo- iba a ser creciente. El sistema, tal como apuntó Boudou, estaba en la mitad de su ciclo de maduración. Este punto explica gran parte de la erogación pública para las prestaciones de afiliados a las AFJP, porque como el régimen rigió durante 14 años y se necesitan 30 de aportes para la jubilación completa, se sabe que todos los beneficiarios habían aportado más tiempo al régimen público.

Boudou agregó: "La crisis dejó en evidencia que, si el valor de la prestación está vinculado a resultados financieros, no sirve".

Los efectos

El economista Arriazu enfocó su disertación hacia los efectos que trae en los sistemas jubilatorios el proceso de envejecimiento de las sociedades. En la Argentina, según puntualizó con datos de Naciones Unidas, la población mayor de 65 años será el 9,8% del total en 2050, mientras que en 2000 la participación era del 3,6 por ciento.

González Fraga recordó que en algún momento el país tuvo 7 aportantes activos por cada pasivo para financiar las prestaciones, pero esa relación se redujo a menos de 2 activos por pasivo. "Obviamente, el sistema va a ser insolvente en pocos años, y hablaremos de subir la edad de jubilación o bajar beneficios", afirmó.

La baja de la relación entre activos y pasivos fue uno de los argumentos de los defensores de la reforma de 1994, que creó el sistema de las cuentas individuales de ahorro para la vejez. Pero el economista calificó de "uno de los grandes errores de los 90" esa reforma, tras considerar que fue un sistema mal diseñado y mal regulado desde su origen, en el que hubo, además, muchos abusos.
El fin de las AFJPAdvierten sobre riesgos del sistema jubilatorio

Reclaman un debate sobre la sustentabilidad

lanacion.com | Política | S?do 29 de noviembre de 2008

No hay comentarios: