jueves, 22 de noviembre de 2007

Las fallas de gobierno, al querer manejar el mercado como un jardín de infantes.

La posibilidad de recibir una baja en el precio de la leche a partir de enero próximo desató una declaración de guerra de los tamberos a la industria láctea, que afirma actuar bajo las órdenes del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.

El conflicto motivó un comunicado de la Mesa Nacional de Productores de Leche (MNPL), que instó a los productores a rechazar cualquier medida "que impida la recomposición de precios" y declaró "el estado de alerta y movilización entre los tamberos".

El comunicado, emitido por el presidente de la Mesa, Roberto Socín, destacó que los tamberos no están en condiciones de hacerse cargo de "las pérdidas de las industrias prebendarias más relevantes". Esto puede interpretarse como una respuesta a los industriales, a quienes los tamberos, siempre en voz baja, atribuyen el origen de la iniciativa de bajar el precio que le pagan la leche de 83 a 73 centavos el litro.

Además, la Mesa publicó una misiva dirigida al presidente Néstor Kirchner en la que se alerta sobre las consecuencias negativas para la actividad de la disminución del precio.

"Esta medida aumentará el cierre de tambos y la liquidación de rodeos y conducirá al desabastecimiento, perjudicando a los consumidores de menor poder adquisitivo", dijo la MNPL, que instó a Kirchner a que "revise y revierta las medidas propuestas".

La exhortación fue firmada por la totalidad de los integrantes de la Mesa, entre los que están la Sociedad Rural Argentina, Confederaciones Rurales Argentinas, la Federación Agraria Argentina, la Asociación de Productores de Leche y las cámaras de productores de las provincias.

Además del comunicado de la Mesa, se multiplicaron las críticas de los productores por el virtual acatamiento por parte de la industria a Moreno.

"Es una medida totalmente errónea y sin sustento técnico, porque la única consecuencia posible va a ser que el productor pase de la lechería a otras actividades, como la soja", dijo Tomás Bonner, productor lechero de la zona de Abasto Sur, provincia de Buenos Aires.

"Este tipo de actitudes ya tiene efecto en el nivel mundial, porque las inversiones no llegan acá. Hay un grupo de productores neozelandeses que prefirieron ir a invertir a Uruguay, a pesar de que nosotros tenemos mejores condiciones naturales. Se compraron 50.000 hectáreas", relató Bonner, para después manifestarse preocupado porque "esta medida es una señal de lo que va a hacer el próximo gobierno, en el que aparentemente los tambos no van a ser tenidos en cuenta".
Control de precios
Críticas a Moreno y a la industria
LANACION.com | Economía | Jueves 22 de noviembre de 2007

No hay comentarios: